lunes, junio 20, 2005

Mary Mary, quite contrary, how does your garden grow?

Siempre he tenido bastante manía a los gnomos de jardín, que si no me acuerdo mal es algo que comparto con mi querida Princesa. Cualquiera que ha visto la película Full Monty puede hacerse una ligera idea de lo mucho que significan los gnomos para los más aficionados en mi tierra.

De hecho cuando estuve mirando la casa donde vivo ahora, estaba a punto de no comprarla cuando ví que unos de la misma calle tenían a Blancanieves con los siete enanitos. Una cosa es que te entre la risa floja mirando los jardines de personas desconocidas y otra bien distinta que estas personas sean tus vecinos.

El colmo fue cuando alguien me regaló un gnomo para el jardín. No me dio un ataque de risa allí mismo porque tampoco era plan así que, intentando disimular mi tic nervioso, lo cogí, le dí las gracias y lo metí en un rincón del jardín donde solamente sabíamos de su existencia el gnomo y yo.

Hace unos cuantos años que tengo el gnomo y ahora le he cogido cariño, hasta hablo con él a veces y lo peor de todo es que ya no está escondido. Mi fama todavía está a salvo por eso porque no se ve desde la calle y los que entran en mi jardín me conocen y que tenga yo un gnomo, encima amigo mío, por algún motivo no les extraña mucho ...

Otra cosa que siempre me ha parecido algo tremendo, por no decir horrendo, son estos setos que después de muchas horas de trabajo se convierten en alguna "obra de arte". Un seto es un seto así que porqué lo tienes que convertir en Setosaurus Rex o similar? Algunas veces son impresionantes, lo reconozco (aunque puede ser que mi debilidad por Johnny Depp me haya nublado la vista) pero tener tu jardín lleno de esto? Va a ser que no ...

Ahora, sin embargo, me he dado cuenta de que puede que cambie de opinión y haga que mis setos salvajes sean domados y convertidos en algo artístico. ¿Porqué? Pues porque creo que es el destino - primero fueron los gnomos y ahora los setos vivos ...

Hoy he aparcado en el parking de una empresa delante mismo de un seto y cuando fuí a sacar el coche tenía a mi lado un chico con una sierra cortando y arreglando el seto con un arte que ya empezó a ablandar mi corazón. El hecho de que me guiñara un ojo justo cuando estaba arrancando el coche y estaba imaginando el elemento en cuestión en mi propio jardín haciendo bonitas esculpturas con mis setos mientras yo le admiraba desde una hamaca tomándome un cocktail me ha despistado un poquito. Estos pequeños detalles pueden haber influido en que en lugar de poner marcha atrás puse primera y me comí el seto! Eso sí, ha quedado precioso, si te gustan los setos artísticos y tienes imaginación, claro ... ejem :P

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