Enough is enough is enuff!

Tengo una amiga que se ha vuelto loca. Hay locura y locura. Yo estoy loca pero lo tengo asumido. Ella está loca y creo que no se ha dado cuenta.

Reconozco que soy mala y que deberían azotarme o quemarme viva, como mínimo, por mis largos silencios en cuanto a contestaciones a e-mails, cartas o llamadas telefónicas. Pero soy humana, hosties y su venganza está siendo muy cruel.

Le ha dado por enviarme un mínimo de 54 mails de chorradas al día, donde evidentemente no faltan las diabólicas cadenas donde me he muerto y/o he entrado en un estado vegetal sin sexo, sin suerte y sin dinero al menos 100 veces al día.

No me gustan los mails de chorradas. Algunos son buenos, puede ser, y si te mandan uno de vez en cuando lo abro, lo leo y hasta me río si me esfuerzo un poquito. Pero si me mandan 54 ni los abro, ni los leo y en lugar de reirme se me activa el tic nervioso, de nivel superior y altamente peligroso.

Cuando estuve en mi estimada pero desaparecida multinacional donde la mayoría de los empleados pasaban el día chateando o reenviando chorradas me ponía enferma pero, como era la jefa, al menos podía decir: BASTA YA y durante un par de horas paraban. Por el respeto que me tenían y tal. También pasé una época, como todos, que me querían alargar el pene. No quiero el pene más largo. De hecho, no tengo pene. Pero que tus amigos te torturen de esta manera debería ser un delito, o al menos denunciable.

Voy a montar una plataforma. Y si no paran, me tiro eh!