martes, abril 04, 2006

Estimados Ministros

Tanta preocupación por Sanidad y Educación y creo que vamos bastante mal, eh?

Estoy en clase rodeada de mis niños de 6-7 años y toca hacer un ejercicio donde básicamente preguntan sobre las costumbres matinales de cada uno:

¿te lavas los dientes?

¿te lavas la cara?

¿te lavas las manos?

¿tocas la guitarra?

¿cantas?

etc...


Y tenían que contestar sí o no a cada pregunta. Creo que la cosa estaba hecha con este humor o algo que no me acaba de llegar, donde en teoría está claro, clarísimo de la muelte, que dirán que sí a las tres primeras preguntas y no a las otras.

Pues, señores ministros, no. En mi clase, tengo a niños que no se lavan demasiado por la mañana pero sí tocan la guitarra. Tengo niños que se lavan la cara pero los dientes no. Tengo niños que se lavan hasta el coche por la mañana. Los niños tienen tendencia a exagerar y querer llamar la atención por ser originales, sin llegar a ser diferentes. Lo sé y lo acepto. Hasta me gusta.


Pero cuando me vino el niño guapo del grupo y todo serio me confiesa que se había equivocado ya que había dicho que sí a algunas preguntas cuando él no se lava ni los dientes, ni las manos ni la cara por la mañana, no había excusa de niños que valiera. Era la pura verdad. Inocencia pura y dura. Ohhhhhhhhhh. Con un gran esfuerzo para disimular mi mal cuerpo le pregunté chistosamente si al menos tocaba la guitarra por la mañana. Me dijo que no. Y le dije, con la sutileza que me caracteriza, que a lo mejor con lavarse los dientes me conformaba.

OK Teacher, ho fare.

¿Lo hará?